martes, 2 de octubre de 2007

CON UN LEJANO ECO

Con un lejano eco, tan distante de mí -como el sentido mismo-, mi garganta se yergue y se debate, luchando contra el barro y el destino. Luchando contra ese barro oscuro, que ocultar de la luz mi pensamiento quiere con un afán loco e impuro. Como un lejano eco en mi vacio, y en mi loco sentido y estridente, quiero aprender el canto de la muerte por si en mi lucha soy vencida y muero.

No hay comentarios: